viernes, 2 de agosto de 2013

DIA 12 - KIOTO (II PARTE)

Hola a todos!

Que tal?

Nosotros bien, aquí seguimos en Kioto. Última noche. Mañana partimos dirección Hiroshima.


Hoy ha sido un día raro. Raro porque era nuestro último día en Kioto y no sabemos si lo hemos aprovechado bien (algunos dirían que no). Digamos que teníamos unas intenciones y las cosas no han salido como teníamos planeadas en un principio. Oye, pero en eso está la aventura y hacerte el viaje tu mismo no? 

La guía recomendaba hacer una ruta por los templos del este de Kioto y como realmente estaban alejados para ir caminando y más después de la caminata que nos pegamos ayer, pues lo de las bicis parecía buena idea. Además las bicis del hostal costaban menos de 7 euros por todo el día.

La cosa ha sido que hoy el sol pegaba fuerte fuerte y nos hemos puesto a pedalear largas distancias. Y cuando decimos largas, son horas y horas de pedaleo. Pues con deciros que hemos pillado las bicis a las 9:30 aproximadamente y las hemos devuelto a las 10 de la noche! Evidentemente no hemos estado subidos todo el rato, pero hemos hecho kilómetros. La sensación que nos da es que hemos rodeado Kioto por carreteras del extraradio. Bueno, vayamos por partes.



A ver quien se atreve a pasar por el mini puente? (Que conste que estas bicis no tienen mucha estabilidad y menos con peso en la cesta frontal).



Hemos pedaleado hacia el este de Kioto y hemos pasado por calles, callejuelas, mercados, puentes, universidades, zonas de riachuelos...
Y hemos visto varios templos y parques. Algunos desde fuera, en otros hemos entrado. La cosa es que el sol picaba y nuestras energías han menguado un poco. Eso no quita que hayamos visto cosas bonitas.









Pero hemos ido haciendo paraditas para comer, beber y refrescarnos...



Y sinceramente, los templos son muy bonitos, pero cuando has llevas días y días viendo templos, pues todos te parecen un poco igual a menos que tengan elementos diferenciados. Por eso hacia el medio día hemos decidido tirar para el templo Kinkaku-Ji o Templo del Pabellón de Oro


 Este templo nos ha gustado mucho y se caracteriza principalmente por su color (las dos plantas superiores estan recubiertas de oro puro) y por estar parcialmente dentro del estanque. Además del templo, los jardines que lo rodean, de estilo japonés, son muy  bonitos.





Como podéis haber ido leyendo, todas las cosas que nos den suerte nos atraen y tontería que todo el mundo hace (que de suerte) pues nosotros también. Que hay que encestar una moneda en un cuenco de piedra pues echamos las que haga falta hasta que la monedita entre y nos vamos de Japón más suertudos que un gato nipón y directos a echar la primitiva.


Hoy el día ha sido poco más en realidad. Volver con las bicis para el centro que ha sido otro buen rato. Hemos hecho parada para merendar que el cuerpo pedía dulce. Hay que decir que hay pastelerías japonesas por todas partes. Aquí les gustan muuuucho los dulces y son super meticulosos con sus elaboraciones. Son muy en plan delicatessen. Y muchas de ellas van en cajas o formato regalo, suponemos porque es un buen detalle para la familia o cuando van de invitados a casa de gente, en donde es muy imporante al parecer no ir con las manos vacías. Pues nosotros la verdad, preferimos más nuestro estilo de pastelerías, por eso tiramos más hacia los dulces de toda la vida. Aquí hemos encontrado muchas boulangeries i pastisseries francesas, en las que es muy difícil elegir porque todo tiene una pintaza.



Y luego nos hemos dado un tiempo para pasear por el downtown, el centro de la ciudad. Hemos dejado las bicis en un parquing de bicis de pago, que solo nos ha costado 150 yenes (poco más de un euro) ya que por el centro de Kioto es casi imposible aparcar y te recomiendan que las metas en parquings porque la policía multa o se lleva las bicis y luego pastón para recuperarlas y como no son nuestras...

En ese rato cada uno ha hecho de las suyas. Carlos se ha comido un helado y ha ido a pasear por el barrio de Geishas. Mike se ha comido un tartita portuguesa de huevo y se ha ido a comprar una mochila nueva. Kike y Miri han ido de compras y han tocado la campana en un templo que había por aquí.

Finalmente hemos cenado en un sitio de noodles por el centro, en el que se ve como se hacen. Ha sido una cena sencilla y rápida, que hemos complementado con un yogur de los omnipresentes Lawson (tiendas tipo seveneleven que hay por todas partes, tienen casi de todo y te sacan de más de un apuro). 




Hoy el post algo cortito, pero no había mucha chicha. Estamos muy cansaditos. A ver si mañana os podemos contar muchas más cosas. Estamos ya en el ecuador del viaje y aún quedan muchas cosas que con las que sorprendernos y de las que disfrutar 

Un abrazo desde Kioto a todos!!! Cuidaros mucho!

1 comentario:

  1. Pues explicado así, a mi me parece un día perfecto :)
    Envidia sana chicos! Me encantan todos vuestros viajes!!!
    Susana
    Pd: kao, te echo de menos! T_T

    ResponderEliminar